Una marca registrada puede referirse a un nombre, un símbolo, una figura, un signo, una palabra o una marca que ha sido establecida por la compañía para distinguir la respectiva compañía o productos en los mercados en los que la entidad legal realiza sus actividades comerciales.
La Oficina de Registro de Marcas y Diseños de la UE (OAMI) es la institución más fiable para registrar tu marca en Europa. Gracias a esta institución, cualquiera puede presentar una solicitud de marca comercial, aunque te recomendamos que contrates a una empresa con experiencia en la presentación. Puede ahorrarte tiempo y dinero, especialmente si alguien presenta una queja contra tu solicitud de marca registrada.
Todas las marcas registradas en España deben ser enviadas y aprobadas por la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM). Antes de presentar la marca comercial, es crucial definir los productos o servicios que pretende proteger.
Es necesario averiguar si esa marca ya estaba registrada, por lo que es obligatoria una verificación previa. En el caso de que la marca no se haya registrado, el signo respectivo debe incluirse en una de las 45 clases existentes, que comprenden diversas actividades económicas que se pueden realizar aquí.
Es importante saber que una marca en España se puede registrar con varias clases.
Requisitos para registrar una marca en España
Es necesario presentar una solicitud que debe contener los siguientes documentos mínimos:
- Una solicitud para recibir un certificado de marca comercial, en el que los inversores proporcionarán información sobre el solicitante
- Una representación de la marca registrada
- La lista de bienes / servicios que representarán la marca respectiva
- Una prueba del pago de la tasa de solicitud